Datos biográficos
GONZÁLVEZ MARTÍNEZ, José. (Elche, 1837 – Zaragoza, 13-XI-1897).
José Gonzálvez Martínez nació en Elche en el barrio de Santa Teresa en 1837. Se le conocía como Paraes atendiendo al sobrenombre de su familia que regentaba un negocio de venta de legumbres. Pronto se inclinó hacia la pintura, admirando las obras de artistas como José Villanueva y Vicente López que albergaban distintas iglesias de Elche. Recibió también la influencia de la pintura religiosa de la mano de Manuel Pérez. José Gonzálvez se especializaría en retrato oficial, género al que dedicaría gran parte de su vida. Estudió en Madrid en la Escuela Especial de Bellas Artes de la Real Academia de las Nobles Artes de San Fernando, que es como se conocía entonces a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Debía encontrarse estudiando en Madrid hacia 1850. Durante sus estudios, consiguió varios premios en las clases de pintura antigua, ropajes, colorido y composición. Pudo conocer al pintor Eugenio Lucas Velázquez (1817-1870), cuya influencia se acusa en la obra de Gonzálvez. En su etapa madrileña, José Gonzálvez se mostró como un pintor ecléctico, tanto en la temática como en el tratamiento de la técnica. Existen indicios que llevan a pensar que pudo ser discípulo de Federico de Madrazo (1815-1894), ya que por aquellos años, el famoso pintor se encontraba ejerciendo la docencia en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, de la que fue director en 1866.
De la etapa madrileña (1860-1880) de José Gonzálvez, han quedado pintoras con todo tipo de temas; paisaje romántico, capeas de pueblo, bodegones, decoraciones de palacio, pintura religiosa y algún retrato. Estas pinturas se encuentran dispersas entre varias colecciones particulares de Elche y Madrid. Destaca la pintura de San José y el Niño (óleo sobre lienzo, 1860. Madrid, colección particular), que es una copia exacta de la obra de Manuel Pérez Baeza. En Madrid logró forjarse cierta reputación que le pudo llevar a realizar (no se ha podido confirmar su autoría), la decoración o restauración de la capilla de la Virgen del Amor Hermoso de la iglesia de San Ginés. En referencia a sus trabajos como decorador, pudo haber trabajado en el Palacio del Marqués de Minestrol, en el Palacio del Duque de Tamames y en el Palacio de Dodegaray, según afirman familiares del pintor a los que pudo entrevistar Tina Pastor Ibáñez.
Durante su estancia es Madrid, realizó varios viajes a Elche, donde residía su familia y frecuentaba el círculo de Aureliano Ibarra. Participó con éste en la decoración del salón gótico del Teatro Llorente.
Su obra de mayor envergadura es la realización de El Cielo, gran lona de 13,30 metros aproximadamente de diámetro que se sitúa en el anillo del arranque de la cúpula de la Basílica de Santa María cumpliendo una doble función en las representaciones del Misteri d’Elx: una metafísica, al representar la gloria de la que descienden los personajes celestiales del Misteri y a la que ascenderá la Virgen en su Asunción a los cielos y otra función que responde a razones técnicas y escenográficas, ya que este cielo oculta a los ojos de los espectadores la tramoya aérea, logrando así crear esa atmósfera sobrenatural y divina que envuelve a las representaciones del Misteri. Recibe el encargo para la realización del cielo desde el Ayuntamiento de Elche en 1867. Se supone que el cielo de José Gonzálvez, almacenado en la Basílica, se destruyó en el incendio de 1936. Tardó veintiocho días en realizarlo, comprendidos entre junio y julio. El soporte era una gran lona de algodón que había sido traída desde Valencia. Gonzálvez representó la gloria celestial de la Asunción de la Virgen mediante un círculo de ángeles situados en torno a una explosión luminosa que irradiaba desde las puertas del cielo, desarrollando de este modo una estética muy barroca acorde con el ambiente tanto de la representación como de la basílica. La lona fue terminada y trasladada a la Basílica de Santa María el 6 de julio de 1867. El Cielo del Misteri de José Gonzálvez, fue copiado en 1924 tras su normal deterioro debido al uso después de casi setenta años de cumplir su función por el pintor ilicitano Sánchez Braceli.
Otras de sus obras de temática religiosa en Elche conocidas sólo por la tradición oral que ha transmitido su familia fueron las pinturas de la Virgen de la Asunción y de San Pascual.
Tina Pastor le atribuye la autoría del retrato a tamaño natural de Amadeo I de Saboya (óleo sobre lienzo, 197 x 113 cm) para el Ayuntamiento de Elche y que actualmente se encuentra expuesto en el muro sur del Salón de Plenos. Contiene una firma con las siglas “M. A.”, que la investigadora cree que puede haber sido añadida por un restaurador que creyó que la obra se debiera a Mariano Antón, cuya autoría ha desestimado por el trazo de la firma y por cuestiones extemporáneas. Representa al que fuera rey de España desde noviembre de 1870 hasta febrero de 1873.
No se sabe ni la fecha del traslado ni el motivo por el cual, el pintor ilicitano decidió instalarse en Zaragoza tras haberse ganado ya una buena reputación como pintor. En la ciudad aragonesa, dejó obras como el retrato de Alfonso XII, realizado hacia 1875 y custodiado en el Museo Provincial de Bellas Artes de Zaragoza. Hacia 1879, realizó para el Ayuntamiento de Elche otro retrato del mismo rey. En Zaragoza, realizó entre otros, los retratos del Marqués de Casa-Jiménez (1883), de D. Jerónimo Borao (1884), de D. Francisco Sierra y Lecha (1884), de Dª Cinta Sichar y Olivan (1886), el retrato del Obispo D. Cosme Marrodan y Rubio (hacia 1888), el retrato del Obispo D. Juan Soldevilla Romero (hacia 1889), el retrato de D. Nemesio Zaldívar (1889), de D. Ramón de Pignatelli (hacia 1890), de D. Joaquín Marton (hacia 1890), de D. Jerónimo Zurita (hacia 1890), de D. Agustín Peiró y Sevil (1891), de D. José Cavero y Álvarez de Toledo (hacia 1890-97), el retrato del Alcalde de Zaragoza (1895), Retrato de una señora (1895), el retrato de La reina regente María Cristina y Alfonso XIII de niño (1895) y el retrato de Juan Tomás y Sierra (1897). En cuanto a pintura religiosa, realizó en 1893 las Cuatro Escenas de la Pasión de Jesucristo para la ermita del Calvario en Borja, Zaragoza.
José Gonzálvez, Murió en Zaragoza el 13 de noviembre de 1897.
Fuentes: Pastor Ibáñez, Tina. De la tradición a la modernidad. Los orígenes de la pintura moderna en Elche. Universidad de Alicante, 2000. // Sansano, G. y Castaño, J. Sainets il.licitans de la Restauració (1874-1896). Instituto de Cultura Juan Gil Albert, Diputación de Alicante, 1997.