El 4 de abril de 1573 , el Consell de la ciudad celebró la sitiada de los capítulos para el maestro de gramática. En él, los jurados de la villa de Elche definieron las normas para que el aprovechamiento de las enseñanzas del maestro de gramática diera sus frutos. Así, para que “ los fadrins façen més fruyt” , el maestro nombrado, Jaume Romà, debía cumplir lo que estaba prescrito muy minuciosamente en dichos capítulos. Esta escuela era de gramática y únicamente para aquellos que ya sabían leer y escribir (si no, debían ser remitidos a pasar previamente por la escuela de lectura y escritura), y esa suficiencia en el saber leer y escribir de manera fluida debía ser examinada por un fraile o capellán. Los días lectivos eran de lunes a sábado, por la mañana y por la tarde, con un total de 10 horas diarias. El horario de mañana iba desde la temprana hora de las 6h. a las 11h. y, después de un descanso de dos horas para comer, se volvía a la escuela de 13h. a 18h. En total, cinco horas por la mañana y cinco por la tarde. Los sábados debían repetir todas las lecciones de la semana, las de mañana por la mañana y las de tarde por la tarde, haciendo dos prácticas. Por otro lado, debía hablarse en latín, no en romance y, si lo hicieran, serían castigados incluso recibiendo azotes.
FUENTE: AHME